Ante la legislatura
parlamentaria recién estrenada, Círculo de Empresarios de Galicia quiere hacer
un llamamiento a la serenidad y a la reflexión, que permitan un debate serio,
consecuente y realista para afrontar los grandes retos a los que se enfrenta la
economía española.
Respetando las
legítimas reivindicaciones localistas y regionalistas, Círculo considera que
las familias y las empresas españolas afrontan problemas similares cuya
solución difícilmente encontrará amparo en discursos extremistas o populistas
que obvian una realidad que apenas ha estado presente en las últimas sesiones
parlamentarias.
La confrontación
política no puede en ningún caso ser excusa para diluir la búsqueda del
bienestar colectivo, basado en los derechos fundamentales proclamados en la
Constitución Española. Hoy más que nunca es exigible un debate sosegado que
permita articular estrategias a largo plazo.
España no puede hacer
frente a los retos de una economía global y digitalizada y de un problema
demográfico de grandes dimensiones encerrándose en discursos que basan sus
objetivos en proclamas territoriales desequilibradoras y proteccionistas.
Mirarse el ombligo,
en un momento en el que la batalla económica mundial se disputa en el tablero
del Pacífico y el Índico; hacer oídos sordos al alcance del ‘brexit’ para buena
parte de las empresas españolas; poner trabas al crecimiento empresarial y a la
creación de empleo; rehuir el análisis profundo de un sistema de pensiones que
urge de soluciones; o no afrontar una reforma seria que depare una
administración ágil y moderna, supondría una pérdida de tiempo imperdonable,
que terminará pasando una gravosa factura al país en su conjunto.
Círculo quiere dar
un voto de confianza a la apuesta por el diálogo, tan repetida durante el
debate de investidura, al tiempo que apela al sentido común de los hombres y
mujeres de Estado que forman parte de las Cortes Generales.