Amelia Palacios refleja en su obra la búsqueda del equilibrio poético en las atmósferas gallegas. Nacida en Pontevedra, no sabe precisar cuándo empezó a pintar. Desde que tiene memoria, convive con telas y pinturas.
A los 17 años, se trasladó a Madrid para estudiar arquitectura, lo que la alejó del mar y de las brumas, y creó en ella la necesidad de regresar al ambiente acuoso de las rías gallegas a través de la pintura.
Creadora inquieta, ha explorado distintos campos artísticos, moviéndose entre la ilustración, el diseño, el videoarte, el arte y la naturaleza, y los libros de artista, entre otros.

Expone su obra con regularidad desde 2005, mostrando sus creaciones en numerosas exposiciones individuales y colectivas en la península. Espacio Infinito, Galería Sargadelos, Sala de Exposiciones de la Xunta y Pazo de Cultura en su ciudad natal, así como el Museo Manuel Torres de Marín; Espacio Alternativo Estocolmo y Casa de Galicia, ambos en la capital de España; Eurostars das Artes, Viana Welcome Center, de Oporto y Viana do Castelo, en el vecino Portugal, son algunos de los espacios donde se ha podido contemplar su obra.
Pedro Burgos Montero escribe sobre ella, manifestando: "Es una artista de vocación, una mujer emotiva que respira la inspiración de lo interno y rezuma pasión por lo bello y lo que le emociona". Igualmente, describe su manera de expresarse: "Con un lenguaje de poco color y mucho tacto", y añade: "Es sencillamente mágica, un privilegio que nos descifra a la vez su genio, su verdad y su ternura".
Dos de sus cuadros forman parte de la exposición colectiva e itinerante sobre los molinos de O Rosal, muestra que dará comienzo en la Sala dos Alonso, en el Ayuntamiento de A Guarda, el próximo 25 de abril.