viernes. 22.11.2024

El Consello da Xunta analizó hoy un informe sobre la primera venta de productos pesqueros frescos realizada el año pasado en las lonjas y centros autorizados de Galicia que muestra que la comercialización de pescado se mantuvo prácticamente estable en relación con 2019 a pesar de las dificultades derivadas de la alerta sanitaria por el coronavirus. La subasta de las distintas especies de pescado sufrió un descenso del 2,4% en 2020, con algo más de 138.000 toneladas, lo que demuestra el esfuerzo realizado por la flota gallega durante el pasado ejercicio para abastecer de alimentos de calidad a la ciudadanía durante la pandemia.

Se trata de un esfuerzo que el sector realizó en muchas ocasiones a pesar de no ser rentable su actividad, como refleja el hecho de que la facturación por la venta de pescado cayó en mayor medida que las descargas, un 6%, con algo más de 300 millones de ingresos por su venta, puesto que el precio medio de los pescados cayó ante la menor demanda de estos productos.

El balance global de 2020 en las lonjas gallegas -incluyendo todas las especies- deja una caída del 5% en las cantidades comercializadas, hasta superar levemente las 150.000 toneladas, y una bajada en la facturación de algo más del 10%, hasta rozar los 413 millones de euros. Estos descensos se deben en buena medida a la evolución de la comercialización de los bivalvos, con una caída de las cantidades subastadas del 34% y de los ingresos obtenidos del 24%, como consecuencia de la menor actividad del sector marisquero durante buena parte del año por el cierre de la hostelería, el principal canal de venta de estos productos.

Esta evolución de las descargas y de las subastas demuestra que el sector pesquero resistió mejor que otras ramas de actividad de la economía gallego el impacto de la crisis por el coronavirus. Entre los datos positivos registrados a pesar de la pandemia está el precio medio de los productos del mar, que alcanzó en 2020 los 2,75 euros el kilo, lo que supone la tercera mejor cotización de la serie, que se remonta a 1997, tras bajar desde los 2,94 euros el kilo conseguidos un año antes.

Por grupos de especies, cerca del 92% de la cantidad comercializada en 2020 era pescado, con esos 300 millones de euros de facturación. Entre el 8% restante destaca el grupo de los bivalvos, que aportó algo más del 4% de las ventas y consiguió unos ingresos de 66 millones de euros, más del 16% de la facturación total de las lonjas y centros de primera venta de Galicia al tratarse de productos que obtienen precios medios altos.

Atendiendo a las zonas geográficas, las lonjas de la provincia de A Coruña fueron las que más especies pesqueras descargaron, con casi el 52% de las ventas (cerca de 78.000 toneladas), seguidas de las de Pontevedra (25% y 38.000 toneladas) y de las de Lugo (23% y 34.000 toneladas). En relación a la facturación, A Coruña también se mantiene como la primera, con el 37,4% de los ingresos y más de 154 millones de euros, seguida muy de cerca por Pontevedra, con el 37,1% de los ingresos, por arriba de los 153 millones de euros. Lugo queda con el 25% restante al superar los 105 millones de euros de cifra de negocios.

En cuanto a las zonas administrativas de la producción, copan la mayor parte de la actividad las que tienen en su área de influencia alguna de las lonjas más grandes: A Mariña, Arousa, Coruña-Ferrol y Vigo. De hecho, esta cuatro zonas concentran el 86% de las ventas y de la facturación del conjunto de centros de primera venta de la comunidad.

POR LONJAS Y ESPECIES

El informe de la Consellería del Mar destaca que las lonjas de A Coruña, Vigo, Ribeira, Burela y Celeiro se mantienen como las más importantes de Galicia al concentrar más del 82% de los productos del mar frescos comercializados y casi el 73% de la facturación. En cuanto a los ingresos generados destacan también otras como O Grove, Cambados, Noia o Carril, fruto de su actividad marisquera y vinculada a la flota de artes menores con recursos que consiguen un alto valor comercial.

Por especies, la más comercializada en 2020 en las lonjas gallegas fue el jurel, con cerca de 32.000 toneladas, seguida de la merluza, con casi 26.000 toneladas, y del lirio, con más de 20.000 toneladas. Estas tres especies concentran más de la mitad de las capturas totales subastadas durante el año pasado. En cuanto a la facturación, la especie destacada es la merluza, con unos ingresos generados de cerca de 100 millones de euros y una cuarta parte de la cifra de negocios total de las lonjas. La siguen a distancia otras especies como el rape (34 millones), la almeja japonesa (más de 28 millones), el jurel (26 millones) y el rapante, con unos ingresos generados de más de 25 millones de euros.

Las ventas de pescado en las lonjas gallegas se mantuvieron en 2020