El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, presentó este mediodía en Pontevedra el primero Proceso Asistencial Integrado (PAI) de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal, que fomenta el seguimiento domiciliario y la formación de enfermería especializada para atender estos pacientes.
Este documento es fruto de un proceso de escucha a las asociaciones de Enfermos de Crohn y Colite Ulcerosa y del trabajo de especialistas en medicina digestiva, además de pediatría, radiología, reumatología, enfermería, farmacia y medicina familiar.
Acompañado por la gerente del Sergas, Estrella López-Pardo, el director general de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal Viñas, y por el gerente del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés, José Flores Arias, el responsable de la Sanidad gallega hizo hincapié en el impacto de esta enfermedad en la vida social de los pacientes, dado que su aparición es más frecuente entre los 15 y los 35 años.
“Nos hablaron de la ansiedad entre el momento de la aparición de los primeros síntomas y la llegada del diagnóstico definitivo, nos hablaron de las dificultades para asumir la cronicidad de esta enfermedad, para ajustar los primeros tratamientos y también de esa necesidad de apoyo para afrontar los efectos de la enfermedad en la vida social”, señaló Comesaña.
El nuevo PAI de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal homologa en todo el Servicio Galego de Saúde los criterios de sospecha diagnósticada, especificando los síntomas que deben llevar a solicitar pruebas complementarias y las otras patologías que se deben descartar antes de derivar al hospital.
CONTINUIDAD ASISTENCIAL
Del mismo modo, esta guía tiene como reto garantizar la continuidad asistencial, definiendo la relación entre atención primaria y hospitalaria y la relación con la atención de enfermería, estableciendo la necesidad de existencia de personal especializado en enfermedad inflamatoria intestinal y definiendo tanto los síntomas como las necesidades de orientación sobre tratamiento, nutrición o sexualidad en las que el paciente debe dirigirse al personal de enfermería.
Teniendo en cuenta la posibilidad de que los pacientes puedan acudir a los servicios de urgencias por complicaciones o brotes, se precisa su coordinación con la atención ambulatoria y el seguimiento domiciliario a través de la plataforma TELEA, que monitoriza la evolución del paciente a través de biomedidas y cuestionarios periódicos.
En la misma línea de garantizar la continuidad asistencial, se establece un protocolo para facilitar la transición entre la atención pediátrica y la de adultos. En palabras del conselleiro de Sanidade: “Esta es una patología que acompaña al paciente a lo largo de su vida y el sistema sanitario debe acompañarlo también sin atrancos. Por eso, este PAI da las pautas de cuando y como realizar esa transición entre la consulta pediátrica y la de adultos”.
Como último reto, se añade el abordaje sociosanitario definiendo el papel del trabajador social a la hora de facilitar el acceso al posible reconocimiento de discapacidad o de un grado de dependencia.