La Xunta avanzará, en colaboración con el sector, en un plan de hostelería segura para que una vez que la evolución epidemiológica del coronavirus permita su reapertura esta se lleve a cabo en un escenario con todas las garantías sanitarias.
El protocolo se abordó esta tarde en una reunión entre el vicepresidente primero de la Xunta, Alfonso Rueda; la conselleira de Empleo e Igualdad, María Jesús Lorenzana; y el conselleiro de Sanidad, Julio García Comesaña con representantes de asociaciones de empresarios de hostelería y restauración.
El plan trasladado hoy al sector se basa en tres pilares: máxima seguridad en el acceso a los establecimientos, máximo seguimiento de posibles brotes y máximo control en el cumplimiento de las normas.
Así, por una parte, con el objetivo de garantizar la seguridad en el acceso, los negocios de hostelería deberán indicar en la entrada al local el límite máximo de aforo para que los clientes sepan se pueden acceder y, en el interior, cumplir la distancia de 1,5 metros de separación entre las mesas.
Además, el Gobierno gallego trabajará en la puesta en marcha de un sistema de registro de las entradas de los clientes, es decir, un sistema de rastreo que permita localizar de manera ágil y sencilla aquellas personas que estuvieran en contacto en el local con un positivo por covid-19 y ante un brote poder proceder a su aislamiento.
En tercero lugar, la Xunta llevará a cabo un plan de control para garantizar el máximo cumplimiento de las normas adoptadas por las autoridades sanitarias para prevenir la covid-19 en los establecimientos de hostelería. Para ejecutar este plan precisará de la colaboración de los ayuntamientos y entre las fuerzas y cuerpos de seguridad.
El proceso de desescalada de las restricciones sanitarias en la hostelería se evaluará en las reuniones del comité clínico una vez analizada la tendencia de la evolución de los datos epidemiológicos en cada área.
SEGUNDO PLAN
Por otra parte, la Xunta activará de forma inmediata, como muy tarde el viernes, el II Plan de Rescate a autónomos, microempresas y sector de la hostelería cerrado, dotado con 75 millones de euros, y al que, como novedad, podrán también acceder otros negocios no hosteleros que tuvieron que parar su actividad a causa de las medidas sanitarias vigentes desde el pasado 9 de enero, como gimnasios, feriantes o parques de ocio infantil.
La Xunta ya culminó el abono de la primera convocatoria de este Plan de Rescate, con 33.600 ayudas concedidas, atendiendo a la totalidad de las solicitudes que cumplieron con los requisitos, con un importe total de 70 millones de euros. De los beneficiarios, 20.000 –el 60%- eran negocios de la hostelería, que recibieron 38,8 millones de euros . En total, la Administración autonómica movilizó más de 160 millones de euros en menos de cuatro meses dirigidos a los colectivos más afectados por la pandemia.
En el II Plan de Rescate los establecimientos hosteleros y de otras actividades cerrados por mor de la pandemia desde enero, contarán con ayudas específicas de los 1.900 euros a los 3.700 en función de la duración de la inactividad y del número de personas empleadas. Podrán sumar además, al ser compatibles, el dinero destinado la personas trabajadoras autónomas y microempresas, por lo que las cuantías máximas podrán conseguir los 15.700 euros.
Así, toda vez que los beneficiarios de la primera convocatoria también pueden acogerse esta, los que obtengan apoyo de ambas dos percibirán entre un mínimo de 3.400 euros y hasta un máximo de 24.200.