El Instituto Tecnológico de Matemática Industrial (ITMATI), participado por las tres universidades gallegas, con sede en el Campus Vida de la Universidad de Santiago e integrado por un equipo de 95 personas, cumple una exitosa trayectoria de siete años. Desde su creación ha desarrollado cerca de 85 proyectos de transferencia de conocimiento a la industria, en sectores tan diversos como los de la energía, los materiales, el naval o el medioambiente.
El presidente de ITMATI, Salvador Naya Fernández, vicerrector de Política Científica, Investigación y Transferencia de la Universidad de A Coruña, señala que “ITMATI se está convirtiendo en un instrumento clave en la que está siendo la cuarta revolución industrial, puesto que reúne el conocimiento para la aplicación de un conjunto de tecnologías que hacen posible todo el potencial de la automatización requerida para una industria 4.0 y la transformación digital cara a una industria 5.0. En ese sentido, las herramientas de modelización, simulación numérica, modelización estadística (Big Data) y optimización y computación de las que hace uso el centro son fundamentales a la hora de hablar de industria inteligente y digital”. En esta línea, destaca que “ITMATI está llamado a ser un referente para la industria gallega, el conjunto de la española y la internacional”, tal y como se puede constatar con los casos de éxito que se recogen en su memoria 2019, aprobada en el Consello de Goberno del centro el 22 de julio de 2020.
La cifra de negocio de ITMATI desde su creación asciende a los 6.661.943,58 €. En 2019 obtuvo una facturación (sin IVA) de 1.019.143,72 €, de la cual el 87,92% ha sido captada a través de contratos y proyectos competitivos de transferencia. El porcentaje del presupuesto de 2019 procedente del sector privado fue de un 69,88%, del que el 68,60% corresponde a entidades privadas españolas, mientras que el porcentaje procedente del sector público ha sido del 30,12%. “Son números espectaculares, ya que la financiación pública directa, aportada por la Xunta de Galicia, se redujo en 2019 a un 10,40%, es decir, que por cada euro invertido en ITMATI el centro captó más de 10. Estas cifras han permitido mantener con éxito la hoja de ruta marcada para conseguir sus principales fines: promover la transferencia de tecnología matemática a partir del conocimiento desarrollado en las universidades gallegas, y dar respuestas eficaces y ágiles a las demandas de las empresas, de las industrias y de las Administraciones Públicas” -señalan desde el centro-.
Ha puesto en marcha cerca de 85 contratos con empresas y entidades
Desde su constitución, ITMATI ha puesto en marcha cerca de 85 contratos con empresas y entidades, siendo 56 de ellos contratos directos con empresas. Toda su actividad en 2019 se ha centrado en las tres grandes áreas de transferencia del centro: Simulación Numérica, que representó un 42,39% del total, seguida por la de Optimización con un 34,35% y la de Estadística y Big Data con un 23,26%. Estas tecnologías le han permitido resolver problemas de gran interés en prácticamente todos los sectores industriales, destacando, por orden de facturación: energía, materiales, alimentación, automoción, logística, economía y finanzas y aeronáutica. Las soluciones aportadas abarcan temáticas tan variadas como el control de calidad, la simulación y optimización de procesos y recursos, la gestión y ayuda en la toma de decisiones y en la planificación de recursos, la explotación de la información de grandes bases de datos o la implementación de algoritmos matemáticos.
La Matemática Industrial es la base para que la actividad de las empresas evolucione hacia el concepto de industria 5.0
La directora de ITMATI, Peregrina Quintela Estévez, manifiesta que “la Matemática Industrial es la base para que la actividad de las empresas evolucione hacia el concepto de industria 5.0. En la Industria 4.0 se priorizaba la automatización de los procesos, minimizando la participación humana. En la Industria 5.0 el objetivo será conseguir los mayores beneficios posibles de la interacción hombre-máquina, encontrando un equilibrio entre el uso de la tecnología y el potencial creativo del ser humano”.
En 2019 se presentó el estudio del “Impacto socio-económico de la investigación matemática y de la tecnología matemática en España”, elaborado por Analistas Financieros Internacionales (Afi) y promovido desde la Red Estratégica en Matemáticas. Entre otras conclusiones se muestra cómo las profesiones con alta intensidad matemática aportan a la economía española lo mismo que el sector del turismo, y que su productividad hora es hasta un 50% superior a la alcanzada en otras profesiones sin intensidad matemática. Este estudio destaca también que las Matemáticas generan directamente 1 millón de empleos, el 6% del empleo total y aportan más del 10% del PIB español. Si se añade el impacto indirecto e inducido de las matemáticas sobre otras actividades económicas en España, las cifras alcanzan el 19,4% del empleo y el 26,9% del PIB. Las profesiones con altos conocimientos matemáticos son las que más crecerán en los próximos años y podrían aumentar la productividad del país un 2,2%. Se trata de una disciplina sin paro. Las Matemáticas son por tanto un ámbito crucial en la actual revolución industrial y en todos los procesos de digitalización del futuro.
