La concatedral-basílica de Santa María acogió este lunes 24 de marzo la lectura del pregón de la Semana Santa de Vigo 2025, un acto que marca el inicio de la programación de la semana grande de la fe católica. El obispo de Mondoñedo-Ferrol, monseñor Fernando García Cadiñanos, fue el encargado de pronunciar el pregón, invitando a los presentes a renovar su mirada y a descubrir la novedad en lo cotidiano.

"Os invito, pues, a abrir los ojos del alma y contemplar con la frescura de un niño lo que está por venir", expresó monseñor García Cadiñanos, subrayando la importancia de liberarse de la rutina y de apreciar cada instante. El acto contó con la presencia de autoridades eclesiásticas, civiles y militares, incluyendo al obispo emérito monseñor Luis Quinteiro y, por primera vez, al obispo de Tui-Vigo, don Antonio Valín Valdés.
Una Semana Santa única y diversa
El pregonero destacó la singularidad de la Semana Santa de Vigo, afirmando que "es diversa y complementaria a otras; es propia y singular, la mejor porque es la vuestra". Monseñor García Cadiñanos resaltó tres elementos característicos de cada Semana Santa: el alma (la fe y la experiencia), el cuerpo (la comunidad cristiana y sus cofradías) y el ropaje (las diferentes formas que adquiere la celebración según la cultura y la época).

Un viaje espiritual hacia la esperanza
El pregón se convirtió en una guía para un viaje espiritual, en el que la Semana Santa se presenta como "un acontecimiento universal conocido por todos, porque es para todos". El prelado mindoniense invitó a los presentes a encontrar en la cruz un símbolo de unión y fraternidad, afirmando que "en torno a la Cruz se genera la necesaria y urgente fraternidad humana".
Música y reflexión
El acto también contó con la participación del Coro Dúas Beiras, que ofreció una lectura musicalizada de un fragmento de la Pasión según san Juan y, al finalizar el pregón, interpretó el Stabat Mater.

Dinamización espiritual
La diócesis de Tui-Vigo busca dinamizar espiritualmente las manifestaciones religiosas en las parroquias de Vigo y poner en valor el sentido religioso de la Semana Santa en la ciudad, promoviendo la participación de personalidades que contribuyan a este objetivo, como monseñor Fernando García Cadiñanos.