El Primer Ministro ha indicado hoy, a través de una grabación de vídeo, que Portugal «ha alcanzado hoy un hito muy importante: el 70% de los portugueses están vacunados con la primera dosis de la vacuna contra Covid-19».
En el mensaje, el Primer Ministro subraya que «este es un paso decisivo hacia los dos objetivos que debemos perseguir: que a finales de este mes de agosto, el 70% de los portugueses tengan la primera dosis de vacunación y que por el a finales de septiembre, el 85% de la población tiene vacunación completa ». Sólo con la vacunación completa es posible que el país vuelva progresivamente a la normalidad: «la vacunación es una condición fundamental para que todos estemos a salvo y para que todos estemos a salvo. Y para que podamos volver a la normalidad de nuestra vida », dijo.
Pido el mayor cuidado: «el virus permanece entre nosotros»
En este mensaje grabado en la Residencia Oficial, en São Bento, el Primer Ministro deja una advertencia y un llamamiento a los portugueses: “es importante no olvidar que la pandemia no ha terminado. Las variaciones continúan y no podemos pensar que todo haya vuelto a la normalidad. No, el virus sigue con nosotros ». Por ello, reforzó el llamamiento para que todos, incluso los ya vacunados, sigan cumpliendo escrupulosamente las normas de protección establecidas por las autoridades sanitarias: «debemos seguir manteniendo toda la prudencia: uso de mascarilla, higiene de manos, distancia física. Ya sea cuando volvamos al trabajo, sea ahora que muchos están de vacaciones». Advertencia de que "vacaciones con Covid-19 no es lo mismo que vacaciones sin Covid-19".
El primer ministro felicita al grupo de trabajo, a los profesionales de la salud y elogia el comportamiento portugués
Al final de esta comunicación, el Primer Ministro hizo hincapié en enviar un importante mensaje de reconocimiento y felicitación: "Quiero felicitar el extraordinario trabajo del grupo de trabajo y los profesionales de la salud que hicieron posible este resultado". Y añadió que este hito alcanzado hoy también sólo fue posible con "la admirable adhesión de los portugueses al proceso de vacunación".
