Las diseñadoras Cristina González Martín y su compañera Lisa Borrini, han concebido el Jardín de la Evolución mostrando como las plantas y las tierras son dependientes de los constantes cambios climáticos.
La historia de la evolución de las plantas comienza para el visitante en la era siluriana con el Jardín de los hongos. Esta era estaba dominada por los Prototaxitas, hongos gigantes de hasta 8 metros de altura representados en el jardín por esculturas en contraplacado. Las Prototaxitas establecieron la atmósfera respirable en la Tierra. Las plantas terrestres todavía tenían poco más de 1 metro de altura representas por las plantaciones de Cavalinha.
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