El Club de Gastronomía de Ponte de Lima recuerda, el próximo sábado 15, al estadista António de Araújo e Azevedo, inscrito en la historia con la denominación Conde da Barca, tierra y posesiones de su madre, y donde instaló una fábrica textil.
Es una evocación a quienes se esforzaron por valorar la agricultura local, promovieron la vinificación y realizaron una importante carrera diplomática en Francia, Rusia, Holanda (Holanda) y Austria.
La fecha elegida para el evento es inmediata al día del nacimiento del homenajeado (14 de mayo de 1754), con el fin de reunir un abanico de genealogistas, entidades oficiales (Municipios de Ponte da Barca y Ponte de Lima, Asamblea Parroquial de este último, coordinador de la Comisión Parlamentaria de Asuntos Exteriores de la Asamblea de la República, Real Associação Viana do Castelo), admiradores de su trabajo y medios de comunicación en nuestro país, España y Bélgica.
Del programa destacamos a las 16.00 h una visita a la casa de los descendientes de Conde da Barca en el pueblo de Ponte de Lima, cerca de la ermita de Pereiras, que acogió al Rey D. Luis I en 1872 (y cuyo banquete se sirvió con el vajilla de porcelana de la Companhia das Índias del diplomático), seguida de otra en la casa solariega donde nació y fue bautizado. En este lugar esta personalidad limiana e internacional será evocada por el firmante y Miguel Aires de Campos, Máster en Historia del Arte por la Universidad de Londres, donde vive y conoce a los dueños de la casa natal del Conde de Barca.
La familia del investigador luso-londinense también ofrecerá un recorrido por las huellas del Conde de Barca: el gran salón con su retrato del italiano Domenico Pelegrini, la biblioteca-archivo, los platos de la mencionada vajilla del período Jiaqing (1796-1820), el jardín construido en 1786 y un banco blasonado.
En cuanto al emprendimiento del noble António de Araújo y Azevedo en la región, evoquemos su intervención como Presidente - fundador de la Sociedad Económica de Amigos y Compatriotas del Bien Público fundada en 1779; sus estatutos pedían "compartir arenas áridas, pueblos pequeños y tierras baldías con familias pobres...y distribución gratuita de semillas y herramientas agrícolas, el cultivo de moras y la propagación de gusanos de seda...y escuelas prácticas para hilar lino, algodón y seda", cuyo primer maestro vino de Dinamarca, y los talleres funcionaban en el antiguo Cuartel del pueblo, hasta hace años, sede de los Bomberos Voluntarios Ponte de Lima. El ilustre ministro de D. João VI, carteras de Marina y Ultramar, y de Relaciones Exteriores y Guerra, más tarde jefe de todo el elenco en Río de Janeiro.