La actuación de anoche quedará grabada en la memoria de los vecinos de O Porriño y alrededores. La plaza del Arquitecto Antonio Palacios se convirtió en un escenario mágico para rendir homenaje a Montserrat Caballé y Luciano Pavarotti con el espectáculo "Querida Montserrat, querido Luciano".
A pesar de una reciente caída, la soprano catalana demostró su inmenso talento y entrega al público, que llenó la plaza hasta la última butaca. "Porriño me sienta bien. Me acaban de tomar la tensión y antes estaba a 16/9 y ahora estoy a 13/8", confesó Caballé, agradeciendo el cariño del público.
El concierto, organizado en colaboración con la Diputación de Pontevedra y el Concello de Porriño, ofreció un repertorio que emocionó al público. Arias de ópera como "Ave María" de Schubert y "O Sole Mio" de Eduardo di Capua se entrelazaron con canciones populares como "Granada" de Agustín Lara y piezas con letras de Rosalía de Castro, como "Rosa de Abril" y "Negra Sombra".
La conexión con Galicia fue evidente durante toda la noche. Montserrat Caballé conoció a su marido, el tenor Bernabé Martí, en la Coruña, y confesó sentirse "un poco gallega también". Además, el público vibró con canciones como "Hijo de la Luna" de José María Cano y "Ensueño", compuesta por Freddie Mercury para Caballé.
El broche de oro lo puso "Libre" de Nino Bravo, que el público coreó emocionado. "Que noche tan mágica la que vivimos ayer! Llenamos la plaza, unidos por la emoción de la música y el legado de dos grandes artistas, Montserrat Caballé y Luciano Pavarotti. Vivir este momento juntos fue un verdadero regalo", declaraba Alejandro Lorenzo