La Xunta de Galicia convertirá el Centro Galego de Artes da Imaxe (CGAI) en la nueva Filmoteca de Galicia coincidiendo con su trigésimo aniversario para reforzar su trabajo archivístico, de recuperación y digitalización de fondos fílmicos. Así lo anunció hoy el conselleiro de Cultura, Educación y Universidad, Román Rodríguez, en un acto conmemorativo en el día en el que se cumplen 30 años desde su apertura el 15 de marzo de 1991.
El titular de Cultura del Gobierno gallego subrayó el papel del centro como “custodio del patrimonio audiovisual gallego, garantiza de su conservación y cómplice de su difusión” que en este tiempo supo combinar la conservación y recuperación fílmica gallega con la proyección de películas. En este sentido, destacó las más de 350.000 piezas audiovisuales que consiguió recopilar, donde se incluyen más de 3.300 títulos cinematográficos en celuloide, de los que más de 1.100 son gallegos; 11.000 títulos videográficos, 9.000 de ellos gallegos; 250.000 fotografías y 10.900 carteles, así como 11.000 libros especializados, 6.000 publicaciones o 9.500 títulos en DVD, Blu-ray y VHS.
También se refirió a la importante función de promoción del audiovisual gallego de la filmoteca autonómica en estos años, con cerca de 350.000 espectadores en las casi que 8.000 cintas proyectadas o los más de 35.000 escolares de 330 centros educativos en las sesiones didácticas realizadas especialmente para ellos. “El CGAI es, sin duda, un espacio en continuo avance, que quiere y debe ser tanto testimonio como protagonista del mundo audiovisual gallego del siglo XXI”, expresó.
EL CAMBIO
Por eso, en el marco de esta progresión, el CGAI emprende un nuevo proceso con el que pasará a denominarse oficialmente Filmoteca de Galicia para reforzar su faceta archivística, en línea con las principales estructuras análogas del resto del Estado y de nivel internacional, con las que viene colaborando. En el horizonte más inmediato, tiene encomendados trabajos de colaboración con la Filmoteca Española para la recuperación del denominado Fondo Barreiro, los materiales audiovisuales firmados por los hermanos pontevedreses Enrique y Ramón Barreiro, pioneros del cine en Galicia, o la digitalización de todos los materiales fílmicos gallegos, que componen nuestra historia audiovisual, y que estén en estos momentos libres de derechos o con derechos localizables.
Se da así continuidad a las funciones de recuperación llevadas a cabo en los últimos años conservando piezas de especial interés, como la digitalización del Archivo Navantia. “Un trabajo minucioso y exhaustivo de cuatro años que nos permite tener documentada una parte de historia de Galicia clave para nuestro desarrollo histórico”, afirmó. Precisamente, con motivo de esta efeméride, se entregó hoy el Archivo Navantia, uno de los últimos trabajos de recuperación documental realizados por el CGAI.
Se trata de un ciento de películas datadas entre 1951 y 1982 que contienen materiales y escenas muy variadas: desde las botaduras de buques desde los antiguos astilleros de Bazán y Astano hasta documentos didácticos y escenas en el trabajo de estas factorías o de la vida en la época en toda la comarca ferrolana. “Estos fondos quedan ya en perfecta conservación y catalogación y hoy, en este día tan señalado, nos complace entregárselos a los responsables actuales de los astilleros de la ría de Ferrol”, indicó el conselleiro.
RETOS
Román Rodríguez llamó la atención sobre el papel del CGAI como testigo de la historia cinematográfica gallega y avanzó que en esta nueva etapa se bautiza su sala de proyecciones con el nombre de José Sellier, en homenaje a una “figura única” que a finales del siglo XIX realizó las primeras exhibiciones de cinematógrafo en su estudio situado en A Coruña con muchas grabaciones de su propia autoría.
Avanzó, además, que de manera inminente, tras la próxima aprobación del Estatuto de la Axencia Galega das Industrias Culturais (Agadic), se abrirá el mecanismo para la dotación del puesto de dirección y se integrará oficialmente en su estructura, un proceso que busca reforzar la capacidad de la Agadic en su actividad de apoyo al sector.
“Estas paredes continuarán siendo el hogar que salvaguarda nuestra producción audiovisual, sin renunciar a ser un compañero de viaje de la experiencia de consumir el mejor cine en pantalla grande”, explicó. Por eso también, la filmoteca autonómica va a asumir tareas de mejora y acondicionamiento de sus instalaciones que incluirá, entre otras, la renovación de la insonorización y la cabina de proyección.