Tras la tremenda explosión, que causó centenares de muertos, por impacto de un misil en el Hospital de Gaza, del que Hamas responsabiliza a Israel, mientras que estos a su vez culpan a la Yihad Islámica, que, según analistas, podría ser la verdadera responsable, sin descartar otras, dado la coincidencia de un masivo lanzamiento que coincidió con ese impacto.
En la frontera norte, de Israel y Líbano, también se empieza a calentar cada vez más la cosa, amenazando la estabilidad regional.
Israel tiene reforzada el área con efectivos de la Brigada Golaní, los cuales están alertando a la población, para que se dirijan a poblaciones más al centro y sur del país, pero muchos prefieren no abandonar sus casas.
Misiles anti-tanque, cohetes y granadas de mortero fueron lanzados a lo largo del miércoles 18, impactando en posiciones avanzadas próximas a la Blue Line, línea fronteriza marcada por las Naciones Unidas, que obligaron a meterse en refugios a ciudadanos de la ciudad dividida de Metula (una valla metálica la divide en dos, mitad libanesa y mitad israelí) así como en los Kibbutzs de Kissufim, Manara, Rosh HaNikra, en la ciudad de Quiryat Shemona, pero las sirenas de alerta también se hicieron sonar en la misma Tel Aviv, coincidiendo con la visita del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, que no dudó en culpar a la Yihad Islámica de ser la autora del lanzamiento del misil que impactó en el Hospital gazatí, aunque matizó que no son pocos los mandatarios de otros países que expresaron sus dudas.
Hamas por su parte está reprochando al líder de la Autoridad Palestina, Mahmud Ridha Abas, de inanición en Cisjordania, porque no hizo declaraciones de acusación a Israel, y Fatah de momento no intentó ninguna acción bélica, mientras su propio líder, Yahya Sinwar, se esconde en Qatar, a Sinwar las IDF le apodaron el muerto ambulante, por ser uno de sus principales objetivos.