“Aldea ecuestre” es un proyecto en el que está invirtiendo Ponte de Lima y, precisamente en ExpoLima, en una segunda fase, se ampliará este centro ecuestre, adelanta a Diario Luso-Galaico, Paulo Barreiro de Sousa, el vicepresidente –primer teniente de alcalde- de Ponte de Lima. El municipio va a crear picaderos de calentamiento, boxes, espacios específicos para técnicos, como veterinarios, y otros vinculados a la actividad ecuestre, como herradores, donde se celebra estos días la Feira do Cavalo.
El proyecto contempla así mismo infraestructuras para que las escuelas relacionadas con la actividad ecuestre puedan tener en ExpoLima un lugar para la enseñanza de la actividad así como para desarrollar cursos profesionales de gestión equina.
Barreiro de Sousa explica que se trata de desestacionalizar la práctica ecuestre creando actividades a lo largo del año para atraer jinetes de todo el mundo.
El Concello de Ponte de Lima contempla también atraer practicantes de equitación de países de Europa y Norte de Europa, donde los inviernos son más duros y prolongados, brindándoles las instalaciones limianas a lo largo del año para dar continuidad a su actividad.
Todo esto será más atractivo conjugándolo con la gastronomía limiana, así como la proverbial hospitalidad lusa.
Ponte de Lima está poniendo las bases para que la actividad ecuestre sea un pilar más de su economía.
