El director xeral de Planificación Enerxética e Recursos Naturais, Pablo Fernández, visitó esta mañana una vivienda particular en Nigrán que el año pasado recibió una ayuda para la instalación de una caldera de biomasa.
Fernández Vila incidió en la eficiencia de este tipo de tecnología, ya que el cambio de una caldera de gasóleo a la actual de pellets -que en este caso cuenta con una potencia de 32 MW- está permitiendo un ahorro energético de 20.000 kWh al año, así como reducir las emisiones en 6.600 kg anuales.
El director xeral recordó que el plazo para solicitar las ayudas de este año por parte de particulares, a las que se destinan 1,5 millones de euros, está a punto de finalizar. De hecho, el último día será el 29 de junio. Los proyectos se limitarán a instalaciones para la generación de energía térmica mediante calderas que utilicen biomasa como combustible. La cuantía será de un 50% con un máximo de 8.000 euros por proyecto.
Dado que las ayudas se otorgan por orden de solicitud hasta el agotamiento del crédito, en estos momentos ya se concedieron un total de 237 ayudas que recibirán 960.000 euros en apoyos. Además, hay 378 entidades adheridas.
Con esta línea de ayudas, el Gobierno gallego sigue avanzando en su objetivo de fomentar el uso de energías renovables, en este caso en los hogares, con la importante reducción de costes energéticos que supone frente a otro tipo de energías.