La Xunta tiene activas todas las convocatorias para este año de las ayudas con las que apoya la independencia económica de las mujeres víctimas de la violencia de género y garantizador las indemnizaciones correspondientes a las heridas de gravedad y a las hijjos huérfanos a causa de esta lacra.
El Gobierno destina 7,4 millones de euros en total en 2021 -aunque estas cuantías podrían incrementarse en función de las necesidades- a cuatro apoyos fundamentales que sitúan a la Comunidad en cabeza en la ayuda dispensada a las víctimas de la violencia de género: ayudas de pago periódico, de pago único, de indemnización y para mujeres heridas de gravedad y/o hijos huérfanos.
El objetivo del Gobierno gallego es garantizar con estos apoyos que las mujeres víctimas de la violencia de género tengan unas condiciones suficientes de independencia económica respecto del agresor y que cuenten con herramientas para dar el primer paso de ruptura con una situación en la que corren peligro y acompañarlas para romper con la violencia.
La Xunta otorgó el año pasado ayudas a casi 1.000 víctimas de la violencia de género, lo que supuso un 30% más que en 2019.
AYUDAS
Galicia es punta de lanza en el apoyo a la independencia económica de las víctimas de la violencia de género al se convertir en la primera Comunidad en disponer de una ayuda económica mensual para las mujeres y ser la única que la mantiene ininterrumpida a lo largo del año.
Estos apoyos suponen pagos de entre 200 y 800 euros cada mes en función de los ingresos y circunstancias familiares. Pueden acceder a los mismas víctimas de violencia de género, de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y de violencia vicaria (las mujeres que pierden sus hijos a manos del maltratador).
En 2020, 639 víctimas resultaron beneficiarias de la misma, un 11% más que en 2019.
Las segundas de las ayudas, de pago único, tienen por objeto apoyar a las mujeres con especiales dificultades para la busca de empleo y su inserción laboral. El Gobierno gallego entrega a las beneficiarias una cantidad que oscila entre la equivalente a 6 meses hasta 24 meses del subsidio por desempleo vigente (en 2021, 451 €) en una única aportación.
Se dirige a víctimas de violencia de género que acrediten recursos insuficientes y dificultades especiales para acceder a un empleo. En 2020 se concedieron 341.
INDEMNIZACIONES Y AYUDAS
La Xunta también garantizadora a percepción de las indemnizaciones cuando correspondan por sentencia, a las mujeres en situación de violencia sexista, previa constatación judicial de que no están percibiéndolas. Con este mecanismo el Gobierno gallego asegura que las mujeres reciben las cuantías, independientemente de las circunstancias económicas de sus agresores. Un total de 11 mujeres percibieron estas indemnizaciones el año pasado.
Las mujeres víctimas de la violencia de género que resultan gravemente heridas y sus descendientes que quedaron huérfanos la causa de esta lacra pueden optar, asimismo, a una línea específica que supone la percepción de 7.000 € acompañada de un programa completo de asistencia integral hacia suya recuperación. Siete personas las percibieron el año pasado.
REFUERZO
Además del mantenimiento de las ayudas, con presupuesto ampliable en función de las necesidades que puedan surgir, el Gobierno gallego mantiene activo el Plan de refuerzo de la atención a las víctimas de la violencia de género desde la irrupción de la pandemia. Pretende garantizar la operatividad total de los servicios de apoyo, de los centros de acogida y otras ayudas complementarias en favor de las mujeres.
Las víctimas tienen asegurada, de este modo, la atención telefónica 24X7 en el número 900 400 273 y asesoramiento jurídico en línea; apoyo psicológico presencial y telemático (también dirigido a víctimas de violencia sexual) y guardia psicológica; seguimiento de las órdenes de protección desde el Punto de coordinación; apoyo psicológico y social en las Oficinas de Atención a las Víctimas en sede judicial; contacto permanente con las usuarias del Centro de recuperación integral; y funcionamiento normalizado del Centro de emergencia (situado en Vigo) para garantizar el acceso de las víctimas en Galicia.
Se reforzó, asimismo, la Red de centros de acogida, con la apertura de un nuevo recurso de acogida en Chantada o la activación de recursos alternativos como albergues, hostales y pensiones, con grupos especializados de intervención y apoyo psicológico, social y de asesoramiento jurídico.