El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, avanzó la puesta en servicio a mediados de 2023 de un nuevo trecho de la Vía de Altas Prestaciones (VAP) Tui-A Guarda entre el Polígono empresarial de Areas y la autopista A-55, luego de una inversión de 21 millones de euros. “Se trata de una infraestructura vital que atraviesa una de las zonas más pobladas y pujantes de la provincia de Pontevedra, a un lado de Portugal con el tráfico e intercambio que eso supone”, señaló Rueda, quien añadió que esta vía también “va a facilitar la actividad” en este importante polígono industrial “que ahora mismo está completo”.
Durante una visita a la construcción de uno de los trechos de este eje estratégico para la comarca del bajo Miño y el sur de la provincia de Pontevedra, Rueda aseguró que el tramo –de 600 metros de longitud— supone un desafío para la ingeniería, pues enlaza sobre una glorieta elevada una vía cara un polígono empresarial, una autovía internacional (A-55), una carretera nacional (N-551) y una autonómica (PO-552). Para ejecutar esta obra, que se encuentra al 40% de la ejecución, la Xunta está realizando una de las mayores apuestas presupuestarias de los últimos años en materia de carreteras.
El presidente de la Xunta recalcó, asimismo, la intención del Gobierno autonómico de continuar con la construcción de la totalidad de la VAP. Después de llevar invertidos más de 80 M€ en la infraestructura, subrayó que este mismo otoño está previsto contar con la Declaración de Impacto Ambiental que ampare la continuidad de la Vía de Alta Capacidad hasta Goián, así como avanzar en el enlace desde Areas hasta la PO-350 en Sobrada (Tomiño) y lo que transcurre entre Estás y Goián.
VERTEBRACIÓN
Por otra parte, el titular del Ejecutivo autonómico puso en valor a apuesta de la Xunta en la vertebración de la Comunidad a través de la apuesta en infraestructuras, tanto nuevas como renovadas. “Desde 2009 construimos 220 kilómetros de vías de altas capacidades en la Comunidad, lo que supone un incremento de un 70% respeto a los kilómetros que había aquel año. Esto supone que ocho de cada diez gallegos viven hoy a menos de 15 minutos de una vía de este tipo”, resaltó, destacando que este tipo de infraestructuras ayudan a vertebrar “el país”.