El Gobierno firmó el Acuerdo de Formación Profesional y Cualificación con los interlocutores sociales , que prevé una inversión de cinco mil millones dedicados exclusivamente a cualificaciones y competencias. Los fondos provienen del Plan de Recuperación y Resiliencia y del programa Portugal 2030.
Durante su intervención y tras la firma del acuerdo -denominado "un plan estratégico para las personas, las empresas y el país" - el presidente del Gobierno, António Costa, afirmó que se trata de un acuerdo de suma importancia para el futuro de Portugal y destacó la necesidad de la participación activa de los interlocutores sociales en el proceso.
El Primer Ministro también recordó las dos convocatorias ya abiertas por iniciativa del Gobierno, en el ámbito de la formación y cualificaciones: una para la formación de jóvenes Steam, en el área de ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas - con el objetivo de formar cerca de 30 mil jóvenes - y el otro para la cualificación digital de 1 145 millones de adultos activos.
A pesar de este "esfuerzo gigante", António Costa también dijo que es necesario "hacer mucho más que esto":
“Tenemos los recursos para poder hacerlo y, por tanto, tenemos que organizarnos para poder hacerlo. Y al contrario de lo que he escuchado muchas veces, estos planes no están destinados a financiar al Estado: hay una pequeña porción para la calificación de los servidores públicos, donde es necesario hacer un gran esfuerzo para calificar "y que representan" unos 80 millones. de euros, en un universo total de 5.500 millones de euros ”, añadió.
El Primer Ministro también afirmó que "estos fondos están a disposición del sistema educativo, centros de formación profesional, politécnicos y universidades, o empresas", "y es absolutamente imprescindible que aprovechemos estos recursos".
Y «porque la formación no puede ser simplemente para disfrazar situaciones de desempleo», António Costa dijo que estas formaciones tienen como objetivo «cualificar puestos de trabajo y dotar a todas las personas de las nuevas herramientas que la doble transición - climática y digital - requerirá que todos tengamos, por eso que podamos seguir trabajando».
Para António Costa, «este es un esfuerzo que atraviesa la sociedad portuguesa», sin ningún sector de actividad que «hoy no tenga que esforzarse para adaptarse a las transiciones climáticas» y que «no pueda beneficiarse de lo nuevo. la nueva sociedad digital '.
"ACUERDO DECISIVO"
La ministra de Trabajo, Solidaridad y Seguridad Social, Ana Mendes Godinho, a su vez, afirmó que “este convenio es un instrumento decisivo para el momento que vivimos, porque la recalificación y reconversión de los trabajadores para dar respuesta a las necesidades de las zonas donde hay una gran demanda de mano de obra '.
«Será fundamental enfocar la formación en áreas estratégicas que agreguen más valor, como el área digital, ambiental, social y fortalecer la capacitación del sector, vinculando la oferta con la demanda. La firma de este convenio, el primero en casi una década y media en este ámbito, reafirma la centralidad de la formación en las prioridades no solo de las políticas públicas sino también de diferentes agentes del mercado laboral ”, dijo.
OBJETIVO EUROPEO
El acuerdo, ahora firmado, tiene como objetivo crear las condiciones para incrementar la formación y las cualificaciones en nuestro país y alcanzar el objetivo europeo de tener, para 2030, el 60% de los adultos de entre 25 y 64 años en actividades de aprendizaje a lo largo de la vida (ALV) cada año. Este objetivo fue uno de los objetivos con los que se comprometieron los 27 Estados miembros en mayo en la Cumbre Social de Porto. Las estimaciones iniciales indican que será necesario tener alrededor de un millón de adultos más por año en LLL para 2030, y la formación profesional será necesariamente uno de los componentes centrales de este esfuerzo. El proceso de establecimiento de objetivos nacionales para los diferentes países, junto con la Comisión Europea, comenzará en septiembre. Este es el primer acuerdo en 14 años entre el Gobierno y los interlocutores sociales en el ámbito de la formación y la cualificación profesionales. Se trata de un acuerdo estratégico de banda ancha, que abarca diferentes dimensiones de la formación profesional.
