La XXXVI edición del Trofeo Pitusa Sabín, la emblemática regata Mar de Finisterre, ha concluido en la ría de Muros y Noia con una emocionante jornada final. La prueba, que atrajo a 40 embarcaciones y forma parte del calendario oficial de la Real Federación Gallega de Vela, ofreció a los participantes un fin de semana lleno de contrastes y desafíos.
La primera jornada estuvo marcada por condiciones meteorológicas adversas, con un viento débil y variable que dificultó la navegación. Solo dos embarcaciones, Mirfak y Urbapaz, lograron alcanzar el Faro del Carrumeiro Chico, mientras que el resto de la flota tuvo que abandonar la prueba al agotarse el tiempo límite.
Sin embargo, el domingo el viento cambió radicalmente, soplando con fuerza desde el suroeste y despejando la niebla que cubría la ría. Estas condiciones permitieron celebrar dos regatas costeras, en las que los participantes demostraron sus habilidades náuticas.
En la categoría ORC 0-3, el triunfo fue para Mirfak, de Diego López, que se mostró superior con un segundo y un primer puesto en las regatas del domingo. Urbapaz, de Fran Edreira, quedó segundo, seguido de Embora.
En la categoría ORC 4-5, el Trofeo Pitusa Sabín fue a parar a manos de Magdalena Zcernik con su embarcación Just Spoko, tripulada íntegramente por mujeres. En los Open, el triunfo fue para el Escora, de Miguel Reboreda.
La entrega de premios contó con la presencia de autoridades locales, representantes de la Federación Gallega de Vela y los patrocinadores del evento.
En resumen, la Mar de Finisterre 2023 ha sido una regata marcada por la diversidad de condiciones meteorológicas y la alta competitividad de los participantes. Los navegantes han demostrado una gran adaptación a las cambiantes condiciones del mar, ofreciendo un espectáculo deportivo de primer nivel.
