EL “auge turístico” de Galicia
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, destacó hoy la consolidación del “auge turístico” de Galicia, al registrar 3,7 millones de viajeros alojados y 6,8 millones de noches en los siete primeros meses de este 2023, lo que supone un 8 % más que en el 2022, “que fue un excelente Año Xacobeo”, remarcó.
El mandatario gallego dio cuenta del balance de la actividad turística presentado hoy en el Consello da Xunta sobre los meses de julio y agosto, al tiempo que de la evolución de la demanda turística reglada en Galicia de lo que va de 2023. Rueda destacó que este informe muestra que la comunidad “consolida una tendencia muy buena” en materia turística, al tiempo que demuestra que “Galicia no es una moda pasajera, sino uno de los destinos más pujantes de España de forma sostenible”.
El presidente de la Xunta también puso en valor el hecho de que este año aumentó el número de turistas extranjeros, que ya presentan el 30 % del total y que con dos millones de pernoctaciones suponen también un “récord histórico”. De igual manera, destacó que los aeropuertos gallegos registraron “máximos de pasajeros” con 3,4 millones, con el liderazgo de Lavacolla (2 millones). Rueda también apuntó que los puertos “batieron marcas” de cruceristas con 246.000 llegados, la mayoría, un total de 150.000, al puerto de A Coruña.
CAMINO DE SANTIAGO
El presidente de la Xunta incidió en la importancia del Camino de Santiago como uno de los “elementos tractores” del turismo en Galicia. Así, apuntó que más de 310.000 peregrinos recogieron su compostela en lo que va de año, lo que supone un 2 % más que en el mismo período de 2022, que fue Año Santo.
De igual manera, hizo hincapié en que se ha observado que se va cumpliendo el objetivo de desestacionalizarlo, pues cada vez son más los que optan por hacerlo fuera de la temporada alta. En esta línea, aseguró que la Xunta trabaja para que Galicia continúe a ser un lugar atractivo para los viajeros durante todos los meses del año. “Y vamos en el buen camino”, aseveró.
Por eso, defendió la preservación de aquellas características que confirman a Galicia como un destino de turismo “tranquilo”, en referencia a la no masificación, a la naturaleza, a la gastronomía o al patrimonio.