Se inicia el cumplimiento de objetivos fijados en el Plan Forestal 2021-2040
El Diario Oficial de Galicia (DOG) publica hoy la resolución de la Consellería de Medio Rural sobre las ayudas destinadas a la elaboración de instrumentos de ordenación o gestión forestales. En este sentido, un total de 677 beneficiarios podrán elaborar a lo largo del presente año 2021 sus instrumentos en casi 200.000 hectáreas de monte gallego, con una aportación por parte de la Administración gallega de unos 4,5 millones de euros.
Así, de los casi 700 beneficiarios un total de 58 son de la provincia de A Coruña, 199 de Lugo, 258 de Ourense y 162 de Pontevedra. En cuanto a la superficie a ordenar, casi la mitad de las hectáreas son en la provincia de Ourense, con 80.605 hectáreas; otras 66.854 hectáreas son en la de Lugo, 37.228 en Pontevedra y 11.554 en A Coruña.
El fin último de estas ayudas es la consolidación de la propiedad forestal mediante una gestión sostenible demostrada, toda vez que dichas ayudas están vinculadas a un compromiso de los beneficiarios de obtener un sello de certificación en un período de un año desde su pago. Hace falta recordar que este certificado, expedido por un sistema de certificación forestal reconocido internacionalmente (PEFC o FSC) tras una auditoría previa, asegura que esa gestión forestal cumple con los estándares de sostenibilidad económica, social y medioambiental que exigen las nuevas políticas de neutralidad climática y transición verde.
Precisamente, con estas ayudas tramitadas desde la Dirección General de Planificación y Ordenación Forestal, se cumple el dispuesto en la Ley de montes de Galicia, que establece que los terrenos forestales deberán disponer de un instrumento de ordenación o gestión forestal. De esta forma, se potenciará el desarrollo de la potencialidad multifuncional de los montes en sus valores económicos, sociales y ambientales, al mismo tiempo que se inicia el cumplimiento de objetivos fijados en el Plan Forestal 2021-2040, de cara a la neutralidad “carbónica”. De esta forma, se pretende tener al final de su período de vigencia unas 850.000 hectáreas de monte bajo con instrumentos de ordenación o gestión forestal y de 650.000 hectáreas bajo sistemas de certificación forestal.
Además, cabe señalar que estos instrumentos de ordenación promueven los servicios ecosistémicos, tales como el secuestro de carbono, la protección de los suelos, del agua, el mantenimiento de la biodiversidad o la preservación de la calidad paisajística. Al mismo tiempo ahondan en la puesta en valor y multifuncionalidad de todos los recursos forestales que proveen los montes; madera, biomasa, resina, setas, pasteros o corteza, así como la creación de las infraestructuras verdes y la ejecución de las actuaciones necesarias para la prevención contra los incendios forestales.
Enlace a la resolución del DOG