La Xunta anticipará entre mayo y junio el pago de diversas ayudas que gestiona para el agro gallego

El presidente de la Xunta, acompañado del conselleiro del Medio Rural, visitó las instalaciones de Queserías Sarrianas, en la localidad lucense de Sarria.

La Xunta anticipará el pago de cerca de 300 millones de euros correspondientes a diferentes líneas de ayudas que gestiona la Consellería de Medio Rural con el objetivo de inyectar liquidez a los agricultores, ganaderos y silvicultores a causa de la emergencia sanitaria, en línea con las recomendaciones del comité de expertos económicos de la Xunta. Estos fondos, que se adelantarán entre mayo y junio, tendrán un impacto directo e inmediato en las economías de los agentes del sector.

El Plan de liquidez que va a aplicar el Gobierno gallego se estructura en tres medidas. En primer lugar, la agilización del pago de subvenciones ya concedidas y que están únicamente pendientes de comprobación en campo y pago por parte de la Administración. Además, mañana se publicará en el Diario Oficial de Galicia una orden que se aplicará a todas las subvenciones convocadas por la Consellería que se encuentren en esta situación. De este modo se dará flexibilidad a los controles en el campo, con el fin de adelantar sus pagos a los meses de mayo y junio. La cuantía conjunta de esta agilización de pagos es de 65,7 millones de euros, de los cuales cerca de 16 millones se están abonando en estos días.

A mayores, la Xunta anticipará hasta un 50% -hasta el momento, en la mayoría de los casos los anticipos eran tan sólo del 10%- de las aportaciones agrícolas, ganaderas y de desarrollo rural de las convocatorias cofinanciadas por fondos europeos, como las de planes de mejora y desarrollo de pequeñas explotaciones o la iniciativa Leader. En total, se adelantarán por este concepto unos 18,5 millones de euros. En este caso concreto se hará sin necesidad de que el interesado aporte aval de la entidad bancaria.

PAC

Además, en tercer lugar, este Plan de liquidez contempla la firma de un convenio con las entidades financieras para el anticipo a los destinatarios de las ayudas de la PAC correspondientes al 2020, que suponen alrededor de 210 millones de euros. Estas aportaciones no requieren obra ni inversión y suelen cobrarse de forma común en los meses de octubre y diciembre, aproximadamente, de cada año.

En virtud de este convenio, las entidades adelantarían las ayudas y la Xunta asumiría los intereses, de forma que el sector pueda cobrar la PAC lo antes posible y sin ningún tipo de coste ni intereses para los ganaderos y agricultores para que cualquiera de ellos perciba la PAC tan pronto como la solicite.

EXPERTOS

En este contexto, con todas estas medias el Gobierno gallego sigue, por una parte, una de las recomendaciones hechas por la comisión de expertos económicos creada por la propia Xunta, en el sentido de promover una efectiva agilización y pago de todos los expedientes administrativos relacionados con subvenciones ya aprobadas.

Por otra parte, también se cumple con lo establecido por el reglamento de ejecución aprobado recientemente por la Comisión europea, en la misma línea de agilizar y flexibilizar los controles administrativos y sobre el terreno para el pago de los fondos Feader. Así, por parte de la UE se abrieron dos posibilidades para sustituir las visitas de certificación. O bien cambiarlas por cualquiera medio de prueba documental, incluidas fotografías geotiquetadas aportadas por el beneficiario, o bien, de no ser posible esto, realizar el control una vez hecho el pago final.

Así, es preciso dotar de liquidez a los agricultores y ganaderos que estuvieron al pie del cañón a lo largo de la emergencia sanitaria, ya que con su compromiso y dedicación permitieron que en nuestras mesas no faltase de nada en esta difícil etapa.

En esa línea, también está la red Mercaproximidade, el canal alternativo de venta promovida por la Xunta para dar salida a los productos de los agricultores y ganaderos gallegos durante la emergencia sanitaria. Ya se adhirieron a ella como proveedores más de 450 productores e industrias y prácticamente todas las cadenas de distribución que operan en Galicia.

Además, la Xunta adquirió a través de esta vía numerosos alimentos a empresas como Queserías Sarrianas, no solo para ayudarlas ante el cierre de sus canales habituales de comercialización, sino también para poner al alcance de los colectivos más vulnerables producciones de proximidad y calidad diferenciada.

En paralelo, la Xunta tiene en marcha una campaña de concienciación y sensibilización para animar a la ciudadanía a consumir productos agroalimentarios gallegos y a ponerlos en valor mediante la gastronomía.