Correos instalará cajeros automáticos en Samos, Cenlle y Cortegada
Correos va a instalar cajeros automáticos en 20 localidades de entre 500 y 3.000 habitantes. La selección de ubicaciones se ha realizado en colaboración con la Secretaría General para el Reto Demográfico, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que ha ayudado a identificar pequeñas poblaciones que no cuentan con oficina bancaria o van a quedarse sin ella en los próximos meses.
Las 20 localidades seleccionadas son las siguientes: en Galicia, Samos (Lugo), Cenlle y Cortegada (Ourense); en Extremadura, Gata, Hoyos, Garrovillas de Alconétar y Aldeanueva del Camino (Cáceres); en Andalucía, Gérgal y Canjáyar (Almería), Villaluenga del Rosario (Cádiz) y Fuente de Piedra (Málaga); en la Comunidad Valenciana, Catadau y Llanera de Ranes (Valencia); y en Castilla y León, Hoyo de Pinares (Ávila) y Fuentes de Oñoro (Salamanca). También se instalarán en localidades de Cataluña, concretamente, en Les Masies de Voltregà (Barcelona) y Bellvís (Lleida); Aragón, Canfranc (Huesca); Castilla-La Mancha, en Horcajo de los Montes (Ciudad Real); y en Canarias, Vallehermoso (Tenerife).
De esta manera, se extiende el proyecto inicial por el que Correos decidió instalar 109 cajeros automáticos en oficinas de toda España, despliegue que está a punto de completarse.
La intención de Correos es seguir ampliando la instalación de cajeros a más poblaciones en las que no hay oficinas bancarias pero en las que la empresa pública sí dispone de oficinas, y poder contribuir a luchar contra la exclusión financiera en las zonas rurales ofreciendo a los ciudadanos la posibilidad de disponer de efectivo diariamente.
Los cajeros pertenecen a la empresa Euro Automatic Cash –compañía española experta en la gestión de flotas de cajeros automáticos, respaldada por el Grupo Banco Santander y Crédit Mutuel- que fue la que obtuvo la adjudicación en la licitación de este proyecto.
De este modo, Correos continúa avanzando en su línea estratégica de acercar sus servicios a los ciudadanos y ofrecerles nuevas prestaciones que faciliten su día a día, aprovechando la capilaridad de su red de oficinas que se configura como un elemento relevante para el desarrollo económico y un instrumento útil en la lucha contra la exclusión financiera en las zonas rurales de España.