La cabaña frisona, más longeva y de más duración productiva
El Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (CIAM), dependiente de la Consellería de Medio Rural a través de la Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria (Agacal), seguirá impulsando en este 2021 sus programas de selección orientados a continuar mejorando la calidad genética de su rebaño frisón de producción de leche. En concreto, apuesta por nuevas líneas genéticas y por la recría de los 32 animales nacidos en el Centro desde 2017, que se encuentran entre el 20% de los mejores ejemplares registrados en el libro genealógico promovido por la Confederación de Asociaciones de Frisona Española (Conafe).
Así, el CIAM aboga por continuar con sus programas de ovopunción, fecundación in vitro, inseminación artificial y transferencia embrionaria para elevar los valores genéticos de su rebaño frisón, concebido para ser utilizado en distintos ensayos, investigaciones o acciones de demostración que se llevan a cabo en el marco de proyectos del Centro. En esa línea, hace falta recordar que en 2015 se adhirió a los programas de mejora genética promovidos por la Consellería de Medio Rural, en colaboración con Genética Fontao y la Federación Frisona Gallega (Fefriga).
De este modo, en los últimos cinco años el Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo puso a disposición de Genética Fontao cinco machos candidatos a sementales susceptibles de utilización en los programas de inseminación artificial por su alto potencial genético. También se benefició de 15 hembras procedentes del programa de transferencia embrionaria y, a día de hoy, cuenta con seis ejemplares de recría nacidos desde 2019 que se encuentran entre las 1.000 mejores jatas con prueba genómica de España. Entre ellas destaca Gaiola, situada en el número 21 con un XICO (ICO genómico) de 5.016 puntos y que, a mayores, ocupa el primer puesto nacional entre las jatas berrendas en colorado.
En la actualidad, la cabaña frisona del CIAM está compuesta por 208 reses, distribuidas en 22 animales de menos de seis meses, 61 de entre seis y 24 meses y 125 de más de 24 meses. Asimismo, se reparten en 111 vacas adultas que ya parieron, un semental de tres años, tres machos de recría y 93 hembras que nunca parieron, la mayoría destinadas a recría.
Cabe destacar que todos los ejemplares frisones del CIAM destacan por tener unos índices genéticos para longevidad por encima del promedio estatal y gallego, lo que redunda en la sostenibilidad del rebaño al tratarse de animales con tendencia a una mayor duración productiva disminuyendo, por tanto, los costes asociados a la recría. También se encuentran por encima del promedio los índices genéticos medios de la ganadería en cuanto a recuento de células somáticas y los ratios que comparan los índices genéticos productivos combinados (ICO) con la consanguineidad de los animales.
A mayores, hace falta resaltar que la explotación frisona del CIAM -incluida en el Registro de explotaciones lecheras gallegas de calidad diferenciada (Recaldi)- produce 630.000 litros de leche anuales, con un porcentaje de grasa muy por encima del promedio nacional y autonómico, considerando tanto la producción estandarizada de lactancias a 305 días como las lactancias naturales.
En ese sentido, cabe señalar que una dieta fundamentada en los pasteros existentes en la finca de Mabegondo, caracterizados por las rotaciones forrajeras y por la mezcla de variedades vegetales con leguminosas, permite mantener altos los niveles de grasa y proteína de la leche en términos porcentuales, así como el feo y el ensilado de hierba y forraje producidos en la propia finca. Este aprovechamiento de la base territorial permitió reducir los insumos a base de concentrados y recortar costes de producción.