Galicia y tres autonomías más solicitan liderar la estrategia Nacional para la conservación del lobo ibérico
La Xunta de Galicia, junto con Asturias, Cantabria y Castilla y León, solicita al Gobierno estatal liderar la estrategia nacional para la conservación del lobo ibérico. La conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez,–junto con el resto de sus homólogos en las otras tres regiones al norte del río Duero- trasladó esta tarde a la ministra de Transición Ecológica y para el Reto Demográfico, Teresa Ribeira, que los gobiernos autonómicos cuentan con una mayor información y con los conocimientos necesarios para controlar de manera adecuada la especie y garantizar el equilibrio necesario en su convivencia con el sector ganadero y la actividad humana.
Así lo trasladaron los conselleiros de Medio Ambiente de las cuatro comunidades autónomas a la ministra Teresa Ribera durante la reunión que celebraron por videoconferencia para analizar la situación del lobo ibérico en España. Tras escuchar la postura de la ministra, los conselleiros de Medio Ambiente del cuatro comunidades autónomas le trasladaron la preocupación del sector ante los efectos que puede provocar la inclusión del lobo ibérico en el Listado de Especies de Protección Especial (LESPRE) y exigieron que reconsidere la postura de su departamento y que tenga en cuenta el criterio técnico de las comunidades autónomas en las que habita esta especie, por que son las que cuentan con un mayor conocimiento y experiencia en la gestión de su población.
Así, defendieron que Galicia, Asturias, Cantabria, y Castilla y León deben ser las comunidades que lideren la estrategia nacional para la conservación del lobo ibérico porque, además de acumular a la mayoría de ejemplares que existen en España, manejan una amplia información científica de importante valor, fruto de una amplia experiencia en la gestión de su población y el respaldo técnico de expertos de reconocido prestigio a nivel nacional.
En este sentido, le recordaron que esta misma semana constituyeron un comité técnico para coordinar -de manera conjunta y desde la colaboración institucional, la cooperación y el consenso- las medidas y actuaciones de gestión que llevan a cabo cada una de las cuatro comunidades en sus respectivos planes de gestión.
Además, recordaron que el rechazo a la iniciativa del Ministerio (incrementar la protección al lobo) cuenta con un amplio respaldo que va más allá del consenso social, científico y político que existe en las regiones al norte, ya que otras autonomías -como el País Vasco o la Comunidad Autónoma de Madrid- trasladaron recientemente su apoyo a la postura de las comunidades loberas, ante el temor de que la falta de control que supondrá la especial protección del lobo provoque un crecimiento desmedido de la población y su expansión la otros territorios del país.
SECTOR AGROGANADERO
La conselleira de Medio Ambiente recordó que recientemente se ha reunido con las entidades que representan a las razas autóctonas gallegas, así como con las asociaciones profesionales agrarias, para informarlas de la situación y hacerlas partícipes de un problema con el que conviven a diario y que, sin duda, tendrá consecuencias sobre el sector.
Estos colectivo trasladó su compromiso en colaborar con las medidas y acciones que se impulsen desde la Xunta para frenar a la Orden ministerial y dejar sin efecto la decisión, porque los responsables del Ministerio tienen que conocer de primera mano las inquietudes del sector, ante esta decisión unilateral del Ministerio; y las graves consecuencias que tendría para miles de ganaderos.
En este sentido, si el Estado no se retracta de su plan, la inclusión en el Lesrpe tendrá que venir acompañada, necesariamente, de ayudas económicas del Ministerio a la ganadería para compensar las pérdidas producidas por los ataques.
Por último, recordó que las políticas desarrolladas por la Xunta en los últimos años en esta materia tienen como objetivo buscar la compatibilidad entre la existencia de manadas de lobos en Galicia y la supervivencia de la ganadería extensiva, una actividad económica clave para las zonas rurales, como fuente generadora de alimentos de calidad y herramienta eficaz en la lucha contra la despoblación.