Existen alternativas al móvil como los relojes inteligentes que preparan a los niños para el uso de la tecnología
La futura ley de protección digital para los menores impondrá la existencia de un control parental gratuito y accesible en todos los dispositivos. La aprobación del anteproyecto de ley será el primer paso para aumentar el control y seguimiento del acceso digital de los menores. Si bien este sistema estará presente en ordenadores, tabletas y televisiones inteligentes, los móviles serán los principales afectados.
Entre las asociaciones de padres y madres ya se venían promoviendo acuerdos para prohibir el móvil entre los menores de 16 años y otras medidas similares. Y había sectores que lo rechazaban porque lo utilizaban como medida de seguridad para saber dónde estaban sus hijos. Sin embargo, expertos del sector destacan que no hay ninguna necesidad de dar teléfonos a menores tan pequeños por simple seguridad.
Se escuchan voces a favor y en contra, aunque parece que la opinión mayoritaria aboga por educar más que por prohibir. Este es el punto de vista que comparte Jorge Álvarez, CEO de SaveFamily, empresa española que comercializa relojes inteligentes dirigidos a niños.
“La tecnología forma parte de nuestro día a día y no podemos negársela a nuestros hijos porque también les aporta beneficios”, explica. “La clave es enseñarles a utilizarla y acompañarlos durante el camino, no podemos entregarles un móvil con 10 años y no supervisar lo que hacen, ni con 13 o 14 años, los padres deben saber lo que hacen sus hijos y guiarlos hasta que alcanzan la madurez necesaria para ser adultos tecnológicamente responsables”.
Además de la presión social, la seguridad de los pequeños es una de las razones más esgrimidas por los progenitores que entregan un móvil a sus hijos a edades tempranas. Sin embargo, existen alternativas adaptadas a la edad de los menores que dan a los padres y madres la seguridad que necesitan, como los relojes inteligentes con GPS. “La mayoría de nuestros clientes son, por un lado, familias en las que ambos padres trabajan y están preocupados porque sus hijos van o vuelven solos del colegio y, por otro lado, padres y madres que no quieren comprar a sus hijos un móvil porque consideran que son demasiado pequeños”, afirma Jorge Álvarez.
Los smartwatches para niños son una buena alternativa al teléfono móvil para niños de 8 a 13 años o incluso más edad. Incluyen muchas de las funcionalidades de un smartphone: llamada, videollamada, mensajería o WhatsApp, reproductor de música, cámara, etc., pero con la diferencia de que todas las funciones se regulan desde la app instalada en el teléfono del progenitor. “Así los adultos controlan todo el dispositivo, desde la agenda de contactos al tiempo de uso y, algo muy importante, los contenidos que reciben”, añade el CEO de SaveFamily. “Así se aseguran de que el dispositivo que el niño tiene en sus manos está adaptado a su edad”.
Estos relojes incluyen un GPS que muestra a los padres la situación del pequeño en todo momento, “lo que invalida la excusa de la seguridad”, matiza Álvarez. Y un modo clase que hace que el reloj únicamente dé la hora durante el horario escolar.